Carolina Aranibar-Fernández Rastrea rigurosamente los flujos del capital-cartografía, comercio marítimo, cultivos comerciales y metales industriales―a través de cuerpos de agua desde la perspectiva de los cuerpos nativos, de género y racializados que lo mueven. Es decir, ella personifica el capital exponiendo cómo los mercados contemporáneos ocultan insidiosamente la opresión histórica. Del imperialismo al colonialismo, y ahora al capitalismo. Sus instalaciones son acuñadas, proyectadas, fundidas, tejidas, con cuentas, grabadas, pisadas y aplastadas. Son spoken-for (apartadas) y se registran en varios niveles de acción y pasividad, así como visibilidad y representación. Text by Matthew Miranda |